Las Interferencias: Equilibrio

sábado, 20 de diciembre de 2014

Equilibrio

El ser humano, para vivir con salud, tiene que tener un equilibrio entre su sistema de "lucha o huida", el del combate, el del stress, el de enfrentar el problema o salir corriendo cuando es imposible luchar, y el sistema de "calma y contacto", el del placer, el contacto humano, de la relajación, ya sea a través de la danza, el masaje, la sexualidad, contemplar un amanecer en plena Naturaleza...

El combate durante las 24 horas del día lleva a la enfermedad y la autodestrucción. La búsqueda del placer constante también termina siendo algo enfermizo, porque se evita confrontar los problemas y las injusticias a través de la evasión.

No creo que la vida tenga que ser un perpetuo combate porque eso equivaldría a morir al primer golpe y un luchador tiene que estar fuerte y sano para vencer. Normalmente, en el mundo del activismo, la salud de muchas personas se resiente de tanto pelear en batallas parciales... Por otro lado, en el mundo de la evasión se encuentra a muchas personas que prefieren vivir en una burbuja a enfrentar los problemas de nuestro tiempo para no sufrir. Creo que es necesario intentar equilibrar ambas tendencias aunque reconozco que es bastante complicado. Equilibrar la lucha y la calma, las tendencias de separación y de unión.

Una lectura recomendable sobre estos temas: Kerstin Uvnäs Moberg "Oxitocina. La hormona de la calma, el amor y la sanación"

ACTUALIZO: Veo necesario añadir algunas aportaciones sobre la idea de "equilibrio" que me han parecido relevantes de la bioquímica Natalia López Moratalla (min 9.10 de este video. Es una pena que el irrespetuoso entrevistador no deje de interrumpirla): "un ser vivo tiene que estar constantemente creando asimetrías", "el equilibrio es la muerte, equilibrarse, serenarse, es morirse", "la vida tiene que estar continuamente sacando energía de ese intercambio con el medio", "todos nos intercambiamos con el medio y eso es lo que nos permite estar alejados del equilibrio".

Y esta otra cita del psicólogo humanista Carl Rogers, del libro "El camino del ser": "Descubro cada vez más que estar vivo implica arriesgarse, actuar sin una certeza absoluta, comprometerse con la vida.
Esto produce cambios y, para mí, el proceso de esos cambios es la vida. Me doy cuenta de que si fuera estable, prudente y estático viviría en la muerte. Por consiguiente acepto la confusión, la incertidumbre, el miedo y los altibajos emocionales, porque ése es el precio que estoy dispuesto a pagar por una vida fluida, perpleja y excitante".

4 comentarios:

  1. Buen post. Ahí estamos, entre la lucha y la huida, aunque confieso que yo estoy más cerca de lo segundo que de lo primero, al menos en cierto sentido :P

    Desarrollo algo más esta idea en mi post "El pesimismo puede reducir la aflicción".

    Un saludo!

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  2. Quería compartir este enlace por si estas reflexiones fueran de tu interés:

    https://culturatransversal.wordpress.com/2014/12/22/publica-sus-tesis-ultrasexistas-en-que-es-una-familia-fabrice-hadjadj-que-fue-ateo-y-nihilista-defiende-la-familia-cristiana-por-salvaje-y-anarquica/

    un saludo

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  3. Se podría afirmar que el equilibrio, o la famosa "escala de grises", sólo pueden exisitir en tanto que existen los extremos con los que compararlos. Es la ley de la polaridad, o de los opuestos. Por la misma ley, el bien no podría existir sin el mal ya que de no existir éste, aquél no sería comprable con nada, y no podría ser lo que es. Por lo tanto, la vida es una LUCHA CONTINUA entre el bien y el mal, de la cual surgen ciertos ciclos de equilibrio. Pero esa "lucha continua" no significa estar 24 horas luchando, lo cual es ciertamente agotador. Es sólo una forma de expresar que en el momento (décadas, siglos, en la escala histórica) en que los humanos dejan de luchar por el bien, el mal triunfa, y se produce el desequilibrio constante.
    Otra forma complementaria de verlo sería la siguiente: El ser humano tiene en su interior, en tanto que humano, tres pulsiones: ser tirano, ser esclavo y ser libre. Las dos primeras, en verdad, son la misma, o van juntas, ya que donde hay un tirano surge un esclavo, y viceversa; por esa razón casi siempre vence ese dúo, ya que la otra pulsión, la de ser libre, está en inferioridad numérica.

    Está claro que la pulsión que debemos alimentar constantemente es la de ser LIBRE (junto a nuestros iguales, por supuesto). Y esa es la lucha perpetua que hay que mantener (no minuto a minuto pero casi...)

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  4. Estoy de acuerdo contigo,compañera.Yo soy cobarde,intento fortalecer mi cuerpo y mi espíritú,pero aún no lo he logrado,por eso te admiro,que gente como tú,presente batalla al capitalismo y al Estado,Es una lucha casi imposible,pero lo que es justo es bueno,por tanto apoyable.Por otra parte,creo que es importante tener vida personal,pues sin esta tampoco hay nada que hacer.lo mejor es intentar abarcar todo,para que en la totalidad no nos perdamos en fundamentalismos.Hay está Heleno Saña,cuando dice que se han hecho muchos males intentando hacer un supuesto bien,con los fanatismos de todo tipo.Es cierto y algo a tener en cuenta,pues pienso,¿para qué sirve una revolución que cambie a unos sinverguenzas por otros?Por otra parte,sin fuerza no se puede desalojar a los poderosos,esta gente no deja el poder voluntariamente.Es una disyuntiva difícil,pero entretanto,habrá que seguir fortaleciendo el espíritu para la lucha que puede que llegue.
    Un saludo.

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